La autoridad indicó que en la SEC no se reportado ninguna denuncia formal por cobros asociados a esta situación.
Frente a la posibilidad de que la distribuidora Conafe efectúe cobros por el cambio de medidor o de empalmes eléctricos a las personas que se vieron afectadas por el terremoto y tsunami del 16 de septiembre en la Región de Coquimbo, el Seremi de Energía, Marcelo Salazar, clarificó hoy que por información emanada de la misma compañía, no está considerada la aplicación de un cargo adicional por este concepto.
“Los trabajos relacionados con el traslado de empalme, así como la conexión y desconexión de las viviendas a la red de distribución eléctrica, a consecuencia del terremoto, no serán asumidos por aquellas familias que realmente tengan daños de consideración”, apuntó la autoridad.
“El Gobierno de nuestra Presidenta Michelle Bachelet velará porque la compañía cumpla con lo que ha señalado y asuma la reposición de los medidores para las familias realmente afectadas por la catástrofe”, sentenció Salazar.
Es más, el Seremi precisó que hasta la fecha, la Superintendencia de Electricidad y Combustibles (SEC) – entidad a cargo de fiscalizar el comportamiento de la empresa Conafe- no reporta ningún reclamo o denuncia de clientes de la Región por esta situación.
La autoridad agregó que en el caso del sector de Baquedano, en Coquimbo, una de las zonas más afectadas por el tsunami, el trabajo de reposición de la energía, mediante la instalación provisoria de un kit de emergencia, no generará costos para dichas personas.
