Desde el Instituto de Desarrollo Agropecuario (INDAP) sabemos que el cambio climático impone un tremendo desafío para el trabajo de los productores caprinos lecheros. La megasequía que estamos viviendo incide en la escasa cobertura vegetal en los territorios —tanto en las zonas de secano como las cordilleranas—, perjudicando directamente a la fuente de alimento del ganado.
Ante dicho contexto se hace necesario impulsar mejores sistemas productivos, ya sean semintensivos o intensivos. Por eso el año 2020 comenzamos a ejecutar el Programa de Fortalecimiento Caprino Lechero, de manera exclusiva en la región de Coquimbo.
Con esta iniciativa (también conocida como Plan Caprino) buscamos que nuestros usuarios y usuarias aumenten sus ingresos por la venta de leche de cabra o derivados de la misma, mediante una explotación eficiente en términos de productividad ganadera. Para lograrlo, sumando los presupuestos de los años 2020 y 2021, hemos contado con más de $4 mil millones, recursos que nos han permitido financiar asesorías especializadas, infraestructuras y convenios de cooperación.
Además, las decisiones para perfeccionar su ejecución son producto de diálogos con los dirigentes crianceros de Elqui, Limarí y Choapa en mesas sociales, donde recopilamos información y opiniones, las que posteriormente analizamos con ellos en una instancia de carácter regional.
El Programa de Fortalecimiento Caprino Lechero tiene una vigencia de cuatro años. Este 2022 será su tercer año y tenemos la plena confianza que el próximo Gobierno continuará su implementación, para que así los productores se sigan potenciando y nos continúen deleitando con un producto tan único, tradicional e identitario de la región de Coquimbo como es el queso de cabra.
