Temas como el cambio climático, la contaminación, el racismo y la crítica social se reflejaron en las obras expuestas en Art Basel, una importante feria internacional que colocó a Miami en el centro de las artes visuales del 5 al 8 de diciembre.
“La sostenibilidad y el malestar social fueron los problemas que abordaron los artistas en la feria de este año, lo que refleja los tiempos turbulentos en que vivimos”, dijo Marc Spiegler, director global de Art Basel.
El evento principal tuvo lugar en el Miami Beach Convention Center, un centro de convenciones en Miami Beach, Florida. Miles de artistas, fans y comerciantes de arte aprovechan la ocasión de Art Basel y exhiben numerosas instalaciones y exhibiciones en Miami y sus alrededores durante todo el mes.
Hay 269 galerías de arte, que representan los cinco continentes, que muestran arte clásico y nuevas piezas de cuatro mil artistas. El monumento contra el racismo, del estadounidense Kehinde Wiley, famoso por su interpretación oficial del ex presidente Barack Obama, llamó la atención.
Una imagen que también tuvo un gran impacto fue una bandera estadounidense sangrando en una mujer negra que protege a sus dos hijos. Su creadora, la americana Faith Ringgold, “analiza las relaciones raciales de Estados Unidos, que a menudo son muy violentas contra los negros”, dijo Katharine Higgs, de la galería Pippy Houldsworth de Londres.
La galería de Sean Kelly también se destacó con la pintura del estadounidense James Casebere, que presenta una casa inundada en una advertencia sobre el aumento del nivel del mar, un problema que a menudo afecta a Miami. “Existe desigualdad social hace mucho tiempo, pero el problema ecológico es ahora un problema urgente porque tenemos muy poco tiempo para resolverlo”, dijo Kelly.
Una de las obras más clicadas del evento fue el controvertido plátano pegado a una pared con cinta adhesiva. La fruta fue comprada en un mercado de Miami Beach y recibió un tratamiento especial sin pudrición. Titulada “Comedian”, la pieza está firmada por el artista Maurizio Cattelan de Italia. Según él, es una provocación para el propio mercado mundial del arte.
Si el excentricismo no fuera suficiente, el trabajo se vendió por no menos de $ 120,000 a un comprador anónimo. Al final, el artista David Datuna, que estaba visitando la feria, se comió el plátano y filmó su “actuación” en Instagram antes de ser expulsado del local. Llamó a su obra “Artista hambriento”. Poco después, otro plátano fue fijado a la pared.
Fundada en 1970, Art Basel es actualmente la principal feria de arte moderno y contemporáneo del mundo, con ediciones en la ciudad suiza de Basilea, así como en Hong Kong y Miami Beach.
